Todos hemos oído hablar sobre las tendinitis, ¿pero es este el término correcto? ¿qué ocurre realmente en nuestros tendones cuando se lesionan? Te traemos la información más reciente sobre el tema.

TENDINITIS, TENDINOSIS O TENDINOPATÍA: ¿CÓMO LA DEBEMOS LLAMAR?

A lo largo de estos últimos años ha habido una evolución trepidante en la comprensión de las lesiones del tendón. Esto ha propiciado un cambio de términos para su denominación, que también ha conllevado la modificación de los planteamientos terapéuticos.

• Tendinitis: En un principio se pensó que el aumento de tamaño y el dolor que sufre el tendón cuando se lesionase relacionaba con un proceso inflamatorio. A esto hace referencia el sufijo -itis.
• Tendinosis: Sin embargo, años más tarde hubo una gran evolución en los campos del estudio celular. Esto permitió observar los procesos que acontecían dentro del tendón, de apariencia degenerativa (-osis = degeneración)
• Tendinopatía: No obstante, las investigaciones de los últimos 5 años nos dicen que ninguna de las 2 teorías era falsa. Se trata más bien de un proceso mixto. Un acúmulo de microinflamaciones perpetuadas en el tiempo parecen promediar un deterioro o degeneración del tendón que se vuelve crónico.

De esta forma entendemos que el término más correcto a utilizar sería el de tendinopatía, en otras palabras, afectación del tendón (-patía = afección)

LA TENDINOPATÍA: UN PROBLEMA MUY LIMITANTE.

Las tendinopatías generan una gran cantidad de bajas en el mundo del deporte, sobretodo en deportes que impliquen mucha potencia de contracción. Supone un 31% de las lesiones en deportes como el baloncesto, y hasta un 44% de las lesiones en el voleibol.

Aunque existen diferentes grados según su evolución por término general el dolor es muy incapacitante. Impide la realización del gesto deportivo en la mayoría de los sujetos, llevándoles a la baja deportiva.

LAS 5 MÁS COMUNES SEGÚN SU LOCALIZACIÓN

La mayoría de las tendinopatías realizan su aparición en tendones que soportan o bien grandes cargas o por el contrario están sometidos a fuerzas de compresión repetitivas. Estas son las 5 más habituales:

• Aquiles
• Rotuliano
• Codo
• Hombro
• Muñeca

LOS 4 FACTORES MÁS HABITUALES QUE LAS CAUSAN

• Carga deportiva: El exceso de actividad física en el tendón destruye su arquitectura e impide que los procesos de regeneración se desarrollen con normalidad.
• Vida sedentaria: El defecto de actividad también impide que el tendón funcione con normalidad.
• Factores metabólicos: Algunas enfermedades metabólicas como el exceso de colesterol, el acumulo de sustancias como el ácido úrico, y otras sustancias elevadas en sangre, propician que la nutrición tendinosa no sea la correcta.
• Nutrición: Una mala alimentación que no aporte los nutrientes que influyen en el metabolismo tendinoso y el exceso de comida de mala calidad produce inflamación de bajo grado en nuestro cuerpo.

SOLUCIONES Y TRATAMIENTO PARA ESTA LESIÓN

• Gestión de cargas: Lo primero a modificar es la carga deportiva que ha de aumentar en caso de personas sedentarias y reducirse en caso de deportistas.
• Nutrición: Una correcta nutrición es la llave para que el tendón comience a modificar su medio biológico y abonar el terreno.
• Ejercicios: En función de la localización tu fisioterapeuta deberá proporcionarte un programa de ejercicios. Estos te permitirán corregir problemas posturales, técnicas deportivas erróneas y movimientos que nutran al tendón afecto.
• EPI: La electrólisis, una técnica de fisioterapia invasiva, está generando resultados muy prometedores en su corta vida.

Si sufres de una dolencia física que te impide o limita la realización de tu vida normal, acude a tu fisioterapeuta de confianza. Las tendinopatías que evolucionan a un grado de cronicidad alto pueden conllevar bajas deportivas de hasta 6 meses. Es importante que tu fisioterapeuta disponga de diagnóstico ecográfico para poder valorar el estado del tendón.